Hola, soy George MD y esto es la última entrada de 'El Observador'. Cuando llegué aquí jamás imagine que yo mismo daría punto y final a este gran blog. El barco se hunde y yo me hundiré con él. Aún quedan unas cuantas líneas por escribir y sacaré por última vez el ojo para observar, esta vez la mirada irá para nuestros propios zapatos y es que a lo largo de la entrada de hoy hablaré sobre lo que ha sido este blog durante 7 años en lqsa.es.
Antes de estas tres temporadas El observador tuvo una primera etapa en 2008. Y quienes mejor para contar esta etapa del blog que sus protagonistas: Adry, idelogo del blog y webmaster de LT, y Álvaro García, escritor del blog hasta la segunda temporada.
Álvaro: No recuerdo muchos detalles de aquel entonces, la verdad. Pero recuerdo parte fundamental. Cuando Adry me ofreció la posibilidad de hacer un blog para LT no me lo pensé ni un instante. Estaba como loco de ganas por estrenarme en LT y más con un blog que prometía tanto como 'El Observador'. Al principio era diario, creo recordar, y hablabamos sobre LT exclusivamente. Hoy me siento triste porque se despide este blog al que quiero tanto y aunque dejara de escribirlo el año pasado he seguido de cerca como director por parte de Alvigar y me da pena despedirle aunque es algo irremediable. Gracias a todos.
Adry: Se despide un gran blog, un contenido mítico que ha sabido evolucionar y adaptarse a los tiempos. Gracias a todos los que habéis disfrutado de él cada semana, entre los que me incluyo. Pasará, sin duda, a la historia.
En el año 2011 se fundó Alvigar Productora con Álvaro García a la cabeza y gracias a ello consiguió recuperar El Observador y empezó una nueva etapa en lqsa.es con una primera temporada que comenzó el 29 de agosto de ese mismo año.
En esta primera temporada el blog tuvo mucho éxito en audiencias y además se crearon los pilares de este blog porque se añadieron secciones para comentar diversos temas como la tele, política, deportes...
El blog se canceló tras un parón de la productora pero acabó regresando con una segunda temporada el 1 de junio del año 2014. El blog cambió el logotipo y el eslogan diciendo que era el original. Se quiso regresar de alguna manera a la primera etapa del blog y desaparecieron la secciones aunque el blog seguía siendo el mismo en esencia.
Ese mismo año yo conocí Alvigar y a lqsa.es y por ello cuando en esa temporada Álvaro García tuvo que dejar temporalmente el blog confió en mi para escribir el blog. Tal vez sea yo el gafe de este blog pero la audiencia bajó cuando empece a escribir y se decidió cambiar otra vez la imagen y recuperar las secciones. Yo dejé el blog y Álvaro regresó y continuó haciendo esta temporada.
A pesar de la buena audiencia Álvaro decidió dejar definitivamente el blog al final de esa temporada para dar paso a una nueva era en El Observador y centrarse en otros proyectos.
La tercera temporada, la actual, empezó conmigo como nuevo escritor el 9 de enero de este año. Con mucha ilusión he escrito cada una de las entradas hasta llegar al día de hoy. Sigo bromeando con Álvaro y otros compis de Alvigar con la posibilidad de que yo sea el causante de la mala suerte de El Observador y ellos me consuelan diciéndome, tal vez tengan razón pero aún así me siento responsable de todo lo ocurrido en este blog durante esta temporada. Aunque tampoco ha sido tan mala ¿No? Yo me he divertido y sé que vosotros también así que ya está. En eso consiste todo esto.
Con esta entrada se acaba esta presente temporada, esta nueva era y se cierra la historia de El observador. Es un placer para mi haber estado con vosotros este tiempo y ser yo quien escriba la última palabra de este blog. Quiero hacer un guiño a Lucas que ha hecho mucho por este blog y me ha ayudado cuando he estado perdido a veces, a Álvaro por supuesto que ha hecho grande a este blog cuando lo escribía y también a Adry que ha participado conmigo durante esta temporada.
Desde Alvigar me han dicho que no hay vuelta atrás, que el observador no regresará y no tengo porque desconfiar de ellos pero la esperanza sigue viva mientras haya vida y aunque este blog este a punto de yacer en un dorado cementerio digno de lo que ha sido en vida, creo que nunca hay que cerrar las puertas a nada y tal vez volvamos a vernos pronto. Quizá no en este blog, pero a mi me queda muchas cosas que decir y trataré de estar de nuevo escribiendo lo antes posible.
Internautas, gracias por seguir este blog. ¡¡HASTA SIEMPRE!!
Descansa en Paz Observador.